En un dramático cambio de
tono, un documento del Vaticano estableció el lunes que los homosexuales tienen
"dones y atributos para ofrecer" y preguntó si el catolicismo podría
aceptar a los gays y reconocer los aspectos positivos de las parejas del mismo
sexo.
El documento, preparado
después de una semana de discusiones en una asamblea de 200 obispos sobre la
familia, agrega que la Iglesia debería desafiarse a sí misma para encontrar
"un espacio fraternal" para los homosexuales sin comprometer la
doctrina católica sobre familia y matrimonio.
Aunque el texto no señaló
ningún cambio en la condena de la Iglesia a los actos homosexuales o su
oposición al matrimonio homosexual, utilizó un lenguaje menos severo y más
compasivo que en textos previos del Vaticano bajo otros papas.
El documento será la base
para las discusiones para la segunda y última semana de la asamblea, conocida
como sínodo, que fue convocada por el papa Francisco y se enfoca en el tema de
la familia.
También servirá para
futuras reflexiones entre los católicos de todo el mundo antes de otro sínodo
el año próximo.
"Los homosexuales
tienen dones y atributos para ofrecer a la comunidad cristiana: ¿somos capaces
de darle la bienvenida a esta gente, garantizándoles un espacio mayor en
nuestras comunidades? Muchas veces ellos quieren encontrar una Iglesia que les
ofrezca un hogar acogedor, dijo el texto.
"¿Son nuestras
comunidades capaces de probar eso, aceptando y valorando su orientación sexual,
sin comprometer la doctrina católica sobre la familia y el matrimonio?",
preguntó en el documento conocido en latín como "relatio".
John Thavis, experto en el
Vaticano y autor del exitoso libro de 2013 "The Vatican Diaries",
calificó el documento como "un terremoto" en la actitud de la Iglesia
hacia los gays.
"El documento refleja
claramente el deseo del Papa Francisco de adoptar un acercamiento pastoral más
misericordioso sobre los temas del matrimonio y la familia", sostuvo.
Un número de participantes
en el sínodo a puertas cerradas ha dicho que la Iglesia debería moderar el tono
en su lenguaje condenatorio cuando se refiere a las parejas gay y evitar frases
como "desorden intrínseco" cuando habla de los homosexuales.
Ésa fue la frase usada por
el anterior papa Benedicto XVI en un documento escrito antes de su elección,
cuando todavía era el cardenal Joseph Ratzinger y dirigía el departamento
doctrinal del Vaticano.
El lenguaje y tono del
documento del lunes, leído a la asamblea en presencia del Papa Francisco,
parecía mostrar que los defensores de un tono más compasivo hacia los
homosexuales y los católicos en las llamadas "situaciones
irregulares" había prevalecido.
El texto indicó que los 1
mil 200 millones de miembros de la Iglesia deberían ver el desarrollo de su
posición sobre los homosexuales como "un importante desafío
educativo" para la institución global.
CORTESÍA DE MATT